El Diagnóstico del Cáncer de Mama se realiza combinando diversas estrategias
Evaluación Médica: Historia Clínica y examen físico detallados para revisar los signos generales de salud, incluso verificar si hay signos de enfermedad, como masas o cualquier otra cosa que parezca anormal.
Examen clínico de la mama (ECM): Examen de la mama realizado por un médico, con palpación cuidadosa de las mamas y las axilas para detectar la presencia de masas o cualquier otra alteración.
Mamografía: Radiografía especial de las mamas en diferentes ángulos.
Ecografía: Puede ser realizada como estudio inicial principalmente en mujeres jóvenes y con mamas con abundante tejido (densas) o como complemento de la mamografía cuando no hay claridad en los hallazgos.
Resonancia magnética: Se realiza en situaciones especiales según el concepto del médico especialista y no es común dentro de los estudios diagnósticos iniciales.
Estudios químicos de la sangre: Permite conocer la función de los riñones, el hígado, la médula ósea entre otros órganos, información que será de gran utilidad en el momento en que se confirme el diagnóstico y el paciente vaya a iniciar un tratamiento específico.
Biopsia: Extracción de tejido tumoral para realizar estudios de patología que permitan confirmar el diagnóstico, predecir la agresividad del tumor con base en los índices de proliferación y su respuesta a los diferentes tipos de tratamiento.